Las raíces del breathwork se remontan a la antiguas enseñanzas yóguicas, los practicantes dirigían su respiración que se llama Pranayama.
Prana significa "energía vital", "aliento vital" o "principio vital".
Yama significa "control".
Pranayama puede traducirse como "controlar la energía vital".
La respiración es la base de muchas prácticas y modalidades espirituales ya que puede proporcionar mayor claridad, perspicacia y comprensión en la vida.
La respiración es la clave y la base del yoga, la meditación, el tantra, el qi gong, el tai chi, las artes marciales, etc.
Al final, cómo respiramos es cómo vivimos.
Los antiguos textos védicos explican cómo alcanzar la conciencia meditativa centrando la mente en la respiración regulada. Los chamanes utilizaban técnicas respiratorias para alcanzar un nivel superior de conciencia y conectar con sus guías espirituales. En la actualidad, algunos investigadores médicos han reunido pruebas concluyentes de que la práctica de técnicas de respiración consciente tiene efectos positivos en el bienestar físico y mental de una persona.
La respiración consciente es un conjunto de ejercicios donde se manipula el ritmo, patrón y profundidad de la respiración con el fin de tomar conciencia de ella y así obtener los mismos beneficios que con una práctica meditativa.
La respiración permite ir más allá del condicionamiento y la programación a los que la sociedad nos ha acostumbrado a lo largo de nuestras vidas. Sólo yendo profundamente más allá se pueden disolver estos viejos patrones. Esto llevará a liberar estos pensamientos y comportamientos.